Interesadas en energía, 10% de las empresas extranjeras que quieren invertir en el país
La moratoria vence en enero de 2011
Tema de interés para ambos países: diplomático
Israel Rodríguez J. / Periódico La Jornada
El gobierno plantea la celebración de un acuerdo marco que abarque toda la frontera marítima entre Estados Unidos y México y no sólo para el área del polígono occidental del Golfo de México, donde se infiere que existen yacimientos petroleros compartidos. Adicionalmente, la intención también es extender la moratoria, que vence el próximo año, para la explotación de los reservorios de crudo transfronterizos, reveló el diplomático Joel Antonio Hernández.
Recordemos que el tratado entre el gobierno de México y el de Estados Unidos sobre la delimitación de la plataforma continental en la región occidental del Golfo de México más allá de las 200 millas náuticas, firmado en la ciudad de Washington, DC, el 9 de junio de 2000, establece una moratoria de 10 años, que vence el 16 de enero de 2011, para la explotación de hidrocarburos limítrofes.
El también consejero jurídico de la Secretaría de Relaciones Exteriores informó que desde hace varios años “venimos celebrando consultas periódicas e intercambiando información técnica con la contraparte estadunidense sobre la posible existencia de yacimientos transfronterizos en el polígono occidental tal y como lo mandata el propio tratado.
“Hemos venido celebrando reuniones periódicas con miras para contar con un instrumento jurídico bilateral que aborde todo el tema de los yacimientos transfronterizos a lo largo de toda la frontera marítima vigente”.
Al participar en la Conferencia internacional sobre exploración y producción de petróleo y gas en México: nuevo régimen contractual, celebrada en el hotel Intercontinental de esta ciudad, el diplomático de carrera señaló: “El enfoque no es exclusivamente resolver el tema de yacimientos transfronterizos en el polígono occidental. El enfoque es contar con un acuerdo marco a lo largo de toda la frontera marítima. Ese es el contenido de las conversaciones”.
Una segunda parte de las conversaciones, explicó, es la necesidad de extender la moratoria de 2000 y en la medida en que estas negociaciones avancen y que podamos nosotros contar con el acuerdo del gobierno estadunidense para llevar a cabo la extensión de la moratoria e iniciar un tratado en esa materia.
“No se trata de un ejercicio de interés de una de las partes. Éste es un ejercicio de interés de ambos gobiernos y también de la industria petrolera de uno y otro lado de la frontera marítima”.
El embajador Joel Antonio Hernández, quien ha participado en las negociaciones iniciadas en 2000, dijo ante representantes de las principales compañías petroleras internacionales, que es del interés de todos contar con una certeza jurídica para la explotación de estos yacimientos. “Siendo la industria de alto costo nadie puede hacerla correr riesgos y entrar a hacer una explotación que sea en detrimento de los derechos de otro Estado porque tendría consecuencias jurídicas graves y costosas. Por lo tanto, es un tema que sin lugar a dudas interesa a todos resolver”.
Quieren firmar contratos con Pemex: Ferrari
Vía ProMéxico llegarán al país 5,100 mdd, dice
Susana González G.
El diez por ciento de las empresas extranjeras interesadas en invertir en México quieren hacerlo en el sector energético, tanto en contratos con Petróleos Mexicanos (Pemex) como en proyectos de energía renovable, aseguró Bruno Ferrari, director general de ProMéxico, entidad gubernamental encargada de promover las exportaciones del país y atraer capitales foráneos.
A través de ProMéxico, precisó, llegarán al país 5.1 mil millones de dólares este año, aproximadamente la tercera parte de la meta oficial de Inversión Extranjera Directa (IED) para 2010, calculada entre 15 y 17 mil millones de dólares.
“Hay mucho interés por los contratos de Pemex, pero no solamente en la parte de la energía tradicional porque hemos visto que gracias al liderazgo de México en el respeto al medio ambiente por el cambio climático se ha dado un enorme acercamiento de empresas de energía renovable”, señaló el funcionario, entrevistado en el segundo Foro Internacional México-Asturias, organizado por el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior (Comce).
Las compañías interesadas en incursionar en el sector energético mexicano –muchas de éstas españolas– quieren producir aquí los insumos que sirven para la generación de energía renovable y exportarlos a otras naciones. Pero también, agregó, pretenden “generar energía para México y para exportación”, mediante el aprovechamiento del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ya que existen ciudades de Estados Unidos que requieren energía, como es el caso del estado de California.
“Tenemos un catálogo de alrededor de 61 empresas del sector de energías renovables con las que ya tenemos un acercamiento”, indicó Ferrari. En lo que va del año, precisó, 111 compañías de diversos giros y países han avanzado en las negociaciones para invertir, en conjunto, 3 mil millones de dólares en México y “varias de ellas, podría hablar de alrededor de 10 por ciento, son del sector de energía o energías renovables. Nos estamos moviendo mucho en ese sector”.
Además del sector energético, la industria aeroespacial se mantiene entre los principales intereses de los inversionistas extranjeros ya que en los últimos años se crearon 150 de las 217 compañías del ramo que existen, indicó.
Otras áreas de interés son las industrias cinematrográfica y electrónica, la infraestructura y el turismo, en productos agrícolas con valor agregado así como la fabricación de implementos médicos en los que México ya se convirtió en el principal exportador de Estados Unidos.
Sobre las previsiones globales de IED para este año, el presidente de ProMéxico destacó que pese a la crisis y el freno en invertir que mostraron los empresarios de todo el mundo, México mantuvo una tendencia positiva en el monto de capitales captados ya que los 5 mil 100 millones de dólares previstos para 2010 representan un incremento de 8.5 por ciento respecto de los 4 mil 700 millones de dólares que llegaron el año pasado.
La moratoria vence en enero de 2011
Tema de interés para ambos países: diplomático
Israel Rodríguez J. / Periódico La Jornada
El gobierno plantea la celebración de un acuerdo marco que abarque toda la frontera marítima entre Estados Unidos y México y no sólo para el área del polígono occidental del Golfo de México, donde se infiere que existen yacimientos petroleros compartidos. Adicionalmente, la intención también es extender la moratoria, que vence el próximo año, para la explotación de los reservorios de crudo transfronterizos, reveló el diplomático Joel Antonio Hernández.
Recordemos que el tratado entre el gobierno de México y el de Estados Unidos sobre la delimitación de la plataforma continental en la región occidental del Golfo de México más allá de las 200 millas náuticas, firmado en la ciudad de Washington, DC, el 9 de junio de 2000, establece una moratoria de 10 años, que vence el 16 de enero de 2011, para la explotación de hidrocarburos limítrofes.
El también consejero jurídico de la Secretaría de Relaciones Exteriores informó que desde hace varios años “venimos celebrando consultas periódicas e intercambiando información técnica con la contraparte estadunidense sobre la posible existencia de yacimientos transfronterizos en el polígono occidental tal y como lo mandata el propio tratado.
“Hemos venido celebrando reuniones periódicas con miras para contar con un instrumento jurídico bilateral que aborde todo el tema de los yacimientos transfronterizos a lo largo de toda la frontera marítima vigente”.
Al participar en la Conferencia internacional sobre exploración y producción de petróleo y gas en México: nuevo régimen contractual, celebrada en el hotel Intercontinental de esta ciudad, el diplomático de carrera señaló: “El enfoque no es exclusivamente resolver el tema de yacimientos transfronterizos en el polígono occidental. El enfoque es contar con un acuerdo marco a lo largo de toda la frontera marítima. Ese es el contenido de las conversaciones”.
Una segunda parte de las conversaciones, explicó, es la necesidad de extender la moratoria de 2000 y en la medida en que estas negociaciones avancen y que podamos nosotros contar con el acuerdo del gobierno estadunidense para llevar a cabo la extensión de la moratoria e iniciar un tratado en esa materia.
“No se trata de un ejercicio de interés de una de las partes. Éste es un ejercicio de interés de ambos gobiernos y también de la industria petrolera de uno y otro lado de la frontera marítima”.
El embajador Joel Antonio Hernández, quien ha participado en las negociaciones iniciadas en 2000, dijo ante representantes de las principales compañías petroleras internacionales, que es del interés de todos contar con una certeza jurídica para la explotación de estos yacimientos. “Siendo la industria de alto costo nadie puede hacerla correr riesgos y entrar a hacer una explotación que sea en detrimento de los derechos de otro Estado porque tendría consecuencias jurídicas graves y costosas. Por lo tanto, es un tema que sin lugar a dudas interesa a todos resolver”.
Quieren firmar contratos con Pemex: Ferrari
Vía ProMéxico llegarán al país 5,100 mdd, dice
Susana González G.
El diez por ciento de las empresas extranjeras interesadas en invertir en México quieren hacerlo en el sector energético, tanto en contratos con Petróleos Mexicanos (Pemex) como en proyectos de energía renovable, aseguró Bruno Ferrari, director general de ProMéxico, entidad gubernamental encargada de promover las exportaciones del país y atraer capitales foráneos.
A través de ProMéxico, precisó, llegarán al país 5.1 mil millones de dólares este año, aproximadamente la tercera parte de la meta oficial de Inversión Extranjera Directa (IED) para 2010, calculada entre 15 y 17 mil millones de dólares.
“Hay mucho interés por los contratos de Pemex, pero no solamente en la parte de la energía tradicional porque hemos visto que gracias al liderazgo de México en el respeto al medio ambiente por el cambio climático se ha dado un enorme acercamiento de empresas de energía renovable”, señaló el funcionario, entrevistado en el segundo Foro Internacional México-Asturias, organizado por el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior (Comce).
Las compañías interesadas en incursionar en el sector energético mexicano –muchas de éstas españolas– quieren producir aquí los insumos que sirven para la generación de energía renovable y exportarlos a otras naciones. Pero también, agregó, pretenden “generar energía para México y para exportación”, mediante el aprovechamiento del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ya que existen ciudades de Estados Unidos que requieren energía, como es el caso del estado de California.
“Tenemos un catálogo de alrededor de 61 empresas del sector de energías renovables con las que ya tenemos un acercamiento”, indicó Ferrari. En lo que va del año, precisó, 111 compañías de diversos giros y países han avanzado en las negociaciones para invertir, en conjunto, 3 mil millones de dólares en México y “varias de ellas, podría hablar de alrededor de 10 por ciento, son del sector de energía o energías renovables. Nos estamos moviendo mucho en ese sector”.
Además del sector energético, la industria aeroespacial se mantiene entre los principales intereses de los inversionistas extranjeros ya que en los últimos años se crearon 150 de las 217 compañías del ramo que existen, indicó.
Otras áreas de interés son las industrias cinematrográfica y electrónica, la infraestructura y el turismo, en productos agrícolas con valor agregado así como la fabricación de implementos médicos en los que México ya se convirtió en el principal exportador de Estados Unidos.
Sobre las previsiones globales de IED para este año, el presidente de ProMéxico destacó que pese a la crisis y el freno en invertir que mostraron los empresarios de todo el mundo, México mantuvo una tendencia positiva en el monto de capitales captados ya que los 5 mil 100 millones de dólares previstos para 2010 representan un incremento de 8.5 por ciento respecto de los 4 mil 700 millones de dólares que llegaron el año pasado.
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