Diversidad es positiva, pero también trae riesgos
México tiene las condiciones para reactivar de forma más rápida el otorgamiento de financiamiento, pues el sistema bancario libró la crisis y debe iniciar un proceso de expansión del crédito más veloz este año.
"No tiene que ver con cuestiones políticas, sino que se está sólido (el sistema bancario), hay mercado y se tiene que hacer.
"Además es de los pocos mercados en que se ve tan claro el arriesgarse: el (banco) que haga un compromiso de fondo con México será el ganador", consideró Marcos Martínez, presidente ejecutivo del Consejo de Administración y director general de Santander.
En entrevista con EL FINANCIERO, previo a la Convención Bancaria que se realiza esta semana en Acapulco, Martínez Gavica recordó que hace tres años se trazó el proyecto de otorgar en los siguientes seis años financiamiento por 3.3 billones de pesos para las pequeñas y medianas empresas, al campo y a la construcción de infraestructura, lo cual se planteó en circunstancias distintas.
"Después de lo que pasó en el mundo, evidentemente no se han dado. En la realidad de la macro, no son logrables como estaban previstas.
"Pero si después de esta crisis el país logra despertar y acelerar su ritmo de crecimiento a las mismas condiciones que estaban en esa época, el crecimiento será mayor porque la banca mexicana ha avanzado más en este momento, sigue muy sólida, hay más competencia y claridad del posicionamiento de los bancos que estamos en México.
"No hay ningún pero desde el punto de vista de la capacidad del sistema financiero, aunque haya mucha incertidumbre en varias cosas y el mundo esté vuelto loco, si de algo ha servido la crisis es en la definición de cosas, y existen las condiciones para que se reactive el crédito en niveles más rápidos."
Adelantó que "cuando la economía crece y las cosas van evolucionando, son un mercado fértil para hacer mejor nuestro trabajo, por lo que habrá buenas noticias, principalmente, habrá más competencia y las autoridades están enfocándose en poner una cancha pareja para todos".
En su opinión, la diversidad que tiene hoy el sistema bancario mexicano es positiva, ya que permite incursionar a más jugadores, aunque también advirtió que eso trae riesgos para los clientes y los nuevos participantes.
"Lo que no me gustaría es que al abrir muchos frentes para bancarizar, los que entran con la idea o excusa de ir hacia cierto lado, vayan por los mismos clientes.
"Entonces, ni bancarizan, hacen ruido, echan a perder a los clientes y luego quiebran, y ya se deformó todo el esquema."
Ola regulatoria
Este año, afirmó Marcos Martínez, será positivo para la banca, aunque reconoció que "siempre hay riesgos".
La nueva ola regulatoria que se avecina podría tener un impacto en el país en la disminución del crédito.
En el caso de los grandes bancos, como Santander, muchas de las medidas que se impondrán, como mayores reservas, no les afectará, pero será un tema que se discutirá esta semana en la reunión del G-20, indicó.
"Evidentemente hay una gran preocupación de cómo regular, de que los grandes bancos hagan lo que tienen que hacer, pero con cuidado para no meter a los países en problemas ni a la economía o la gente.
"Ahí está centrada la preocupación del G-20, ahí hay que recoger los aprendizajes de la crisis y que se incluyan en una regulación más global para que los bancos grandes, en donde estamos varios de los que operamos en el país, si lo hacemos mal, no pongamos en riesgo a nadie."
Santander, tras una bancarización "afinada"
En el segundo trimestre de 2009, Santander inició el proceso de reapertura del crédito para tomar ventaja de los competidores que vivían la incertidumbre o dudas sobre el futuro de la economía mundial, afirmó Marcos Martínez Gavica.
El presidente ejecutivo del Consejo de Administración y director general de Santander indicó que "llevamos creciendo 12 meses más que el mercado y en tarjetas de crédito no se ha avanzado porque nos adelantamos a limpiarlas.
"Hay menos cartera, pero sana, y en corporativo no crecimos porque hoy las empresas tienen mejores opciones que el balance de los bancos."
Lograron salir bien librados de la crisis, consideró, debido a que se ha cuidado el nivel de riesgo, ya que "con eso no se juega, porque se juegan el negocio y el banco".
Reconoció que el reto del banco "es que hayamos pasado la crisis y luego veamos pasar de nuevo a nuestros competidores; no queremos ser una historia transitoria, el banco no está dispuesto a hacerlo".
Martínez Gavica aclaró que no buscan competir por alcanzar el nivel de los dos más grandes, sino ser un banco que en los próximos años sus clientes tengan todos los servicios y productos que ofrecen.
"La principal fuente de bancarización para nosotros es la nómina; hay que ofrecer servicios y productos diferenciados para cada perfil de cliente, y hay que tener avances tecnológicos y desarrollos estadísticos para hacer banca confiable. Estamos bancarizando, pero afinados", dijo.
(Jeanette Leyva Reus/El Financiero/MCH)
México tiene las condiciones para reactivar de forma más rápida el otorgamiento de financiamiento, pues el sistema bancario libró la crisis y debe iniciar un proceso de expansión del crédito más veloz este año.
"No tiene que ver con cuestiones políticas, sino que se está sólido (el sistema bancario), hay mercado y se tiene que hacer.
"Además es de los pocos mercados en que se ve tan claro el arriesgarse: el (banco) que haga un compromiso de fondo con México será el ganador", consideró Marcos Martínez, presidente ejecutivo del Consejo de Administración y director general de Santander.
En entrevista con EL FINANCIERO, previo a la Convención Bancaria que se realiza esta semana en Acapulco, Martínez Gavica recordó que hace tres años se trazó el proyecto de otorgar en los siguientes seis años financiamiento por 3.3 billones de pesos para las pequeñas y medianas empresas, al campo y a la construcción de infraestructura, lo cual se planteó en circunstancias distintas.
"Después de lo que pasó en el mundo, evidentemente no se han dado. En la realidad de la macro, no son logrables como estaban previstas.
"Pero si después de esta crisis el país logra despertar y acelerar su ritmo de crecimiento a las mismas condiciones que estaban en esa época, el crecimiento será mayor porque la banca mexicana ha avanzado más en este momento, sigue muy sólida, hay más competencia y claridad del posicionamiento de los bancos que estamos en México.
"No hay ningún pero desde el punto de vista de la capacidad del sistema financiero, aunque haya mucha incertidumbre en varias cosas y el mundo esté vuelto loco, si de algo ha servido la crisis es en la definición de cosas, y existen las condiciones para que se reactive el crédito en niveles más rápidos."
Adelantó que "cuando la economía crece y las cosas van evolucionando, son un mercado fértil para hacer mejor nuestro trabajo, por lo que habrá buenas noticias, principalmente, habrá más competencia y las autoridades están enfocándose en poner una cancha pareja para todos".
En su opinión, la diversidad que tiene hoy el sistema bancario mexicano es positiva, ya que permite incursionar a más jugadores, aunque también advirtió que eso trae riesgos para los clientes y los nuevos participantes.
"Lo que no me gustaría es que al abrir muchos frentes para bancarizar, los que entran con la idea o excusa de ir hacia cierto lado, vayan por los mismos clientes.
"Entonces, ni bancarizan, hacen ruido, echan a perder a los clientes y luego quiebran, y ya se deformó todo el esquema."
Ola regulatoria
Este año, afirmó Marcos Martínez, será positivo para la banca, aunque reconoció que "siempre hay riesgos".
La nueva ola regulatoria que se avecina podría tener un impacto en el país en la disminución del crédito.
En el caso de los grandes bancos, como Santander, muchas de las medidas que se impondrán, como mayores reservas, no les afectará, pero será un tema que se discutirá esta semana en la reunión del G-20, indicó.
"Evidentemente hay una gran preocupación de cómo regular, de que los grandes bancos hagan lo que tienen que hacer, pero con cuidado para no meter a los países en problemas ni a la economía o la gente.
"Ahí está centrada la preocupación del G-20, ahí hay que recoger los aprendizajes de la crisis y que se incluyan en una regulación más global para que los bancos grandes, en donde estamos varios de los que operamos en el país, si lo hacemos mal, no pongamos en riesgo a nadie."
Santander, tras una bancarización "afinada"
En el segundo trimestre de 2009, Santander inició el proceso de reapertura del crédito para tomar ventaja de los competidores que vivían la incertidumbre o dudas sobre el futuro de la economía mundial, afirmó Marcos Martínez Gavica.
El presidente ejecutivo del Consejo de Administración y director general de Santander indicó que "llevamos creciendo 12 meses más que el mercado y en tarjetas de crédito no se ha avanzado porque nos adelantamos a limpiarlas.
"Hay menos cartera, pero sana, y en corporativo no crecimos porque hoy las empresas tienen mejores opciones que el balance de los bancos."
Lograron salir bien librados de la crisis, consideró, debido a que se ha cuidado el nivel de riesgo, ya que "con eso no se juega, porque se juegan el negocio y el banco".
Reconoció que el reto del banco "es que hayamos pasado la crisis y luego veamos pasar de nuevo a nuestros competidores; no queremos ser una historia transitoria, el banco no está dispuesto a hacerlo".
Martínez Gavica aclaró que no buscan competir por alcanzar el nivel de los dos más grandes, sino ser un banco que en los próximos años sus clientes tengan todos los servicios y productos que ofrecen.
"La principal fuente de bancarización para nosotros es la nómina; hay que ofrecer servicios y productos diferenciados para cada perfil de cliente, y hay que tener avances tecnológicos y desarrollos estadísticos para hacer banca confiable. Estamos bancarizando, pero afinados", dijo.
(Jeanette Leyva Reus/El Financiero/MCH)
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