El mandatario estadounidense destaca la necesidad de una reforma financiera significativa para una economía sana
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, destacó hoy la necesidad de una reforma financiera significativa para evitar que se repitan las acciones especulativas de Wall Street que dieron origen a la reciente crisis.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, destacó hoy la necesidad de una reforma financiera significativa para evitar que se repitan las acciones especulativas de Wall Street que dieron origen a la reciente crisis.
Aunque no mencionó de manera directa la demanda interpuesta este viernes por la Comisión de Valores (SEC, por sus siglas en inglés) contra la firma financiera Goldman Sachs, Obama puntualizó: 'no podemos permitir que la historia se repita'.
'Nunca más los estadounidenses deben ser forzados a pagar el precio de la irresponsabilidad y especulación en Wall Street, de quienes hagan apuestas riesgosas esperando que los contribuyentes estarán ahí para evitar su caída', añadió el mandatario.
El gobierno de Estados Unidos acusó este viernes a Goldman Sachs de defraudar a inversionistas con la venta de instrumentos de deuda relacionados al mercado hipotecario, que a la postre resultó en pérdidas millonarias.
Ante miembros de su equipo económico en la Casa Blanca, Obama señaló que el fracaso de la reforma financiera dejaría abierta la puerta a una nueva crisis porque las reglas que posibilitaron ésta quedarían intactas.
'Por eso espero que vamos a tener una fuerte propuesta de reforma que demande una nueva responsabilidad de Wall Street y ofrezca nuevas protecciones a los consumidores', apuntó.
El mandatario estadounidense consideró que la nueva reforma forzará a los bancos e instituciones financieras a pagar por las decisiones que asuman, 'y eso significa no más rescates'.
Asimismo, dicha reforma traerá mayor transparencia sobre el mercado de derivativos, los complicados instrumentos financieros que permitieron a bancos e instituciones financieras colocar riesgosas inversiones no reguladas, agregó.
Obama aludió en particular el caso del gigante de seguros AIG, que colocó miles de millones de dólares en estos instrumentos ligados a créditos hipotecarios de alto riesgo.
El colapso de estas inversiones colocó a la firma al borde de la quiebra, la cual fue evitada sólo después que el gobierno inyectó miles de millones de dólares para su rescate.
'Cuando las cosas salen mal, como sucedió en AIG, pueden echar abajo una economía entera y es por eso que tenemos que traer mayor transparencia y supervisión cuando se trata de derivativos', sostuvo.
Obama reiteró su confianza en que la reforma que se discute actualmente en el mercado pueda tener apoyo bipartidista para su aprobación, pese a la resistencia manifestada hasta ahora por el liderazgo republicano.
'Mi esperanza es que todos, demócratas y republicanos, vamos a poder encontrar terreno común en esta tema y avanzar. Esto es muy importante para que se empantane en el jaloneo' político, aseveró.
Fuente: EL Universal
'Nunca más los estadounidenses deben ser forzados a pagar el precio de la irresponsabilidad y especulación en Wall Street, de quienes hagan apuestas riesgosas esperando que los contribuyentes estarán ahí para evitar su caída', añadió el mandatario.
El gobierno de Estados Unidos acusó este viernes a Goldman Sachs de defraudar a inversionistas con la venta de instrumentos de deuda relacionados al mercado hipotecario, que a la postre resultó en pérdidas millonarias.
Ante miembros de su equipo económico en la Casa Blanca, Obama señaló que el fracaso de la reforma financiera dejaría abierta la puerta a una nueva crisis porque las reglas que posibilitaron ésta quedarían intactas.
'Por eso espero que vamos a tener una fuerte propuesta de reforma que demande una nueva responsabilidad de Wall Street y ofrezca nuevas protecciones a los consumidores', apuntó.
El mandatario estadounidense consideró que la nueva reforma forzará a los bancos e instituciones financieras a pagar por las decisiones que asuman, 'y eso significa no más rescates'.
Asimismo, dicha reforma traerá mayor transparencia sobre el mercado de derivativos, los complicados instrumentos financieros que permitieron a bancos e instituciones financieras colocar riesgosas inversiones no reguladas, agregó.
Obama aludió en particular el caso del gigante de seguros AIG, que colocó miles de millones de dólares en estos instrumentos ligados a créditos hipotecarios de alto riesgo.
El colapso de estas inversiones colocó a la firma al borde de la quiebra, la cual fue evitada sólo después que el gobierno inyectó miles de millones de dólares para su rescate.
'Cuando las cosas salen mal, como sucedió en AIG, pueden echar abajo una economía entera y es por eso que tenemos que traer mayor transparencia y supervisión cuando se trata de derivativos', sostuvo.
Obama reiteró su confianza en que la reforma que se discute actualmente en el mercado pueda tener apoyo bipartidista para su aprobación, pese a la resistencia manifestada hasta ahora por el liderazgo republicano.
'Mi esperanza es que todos, demócratas y republicanos, vamos a poder encontrar terreno común en esta tema y avanzar. Esto es muy importante para que se empantane en el jaloneo' político, aseveró.
Fuente: EL Universal
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