- A la Casa Blanca le “preocupa seriamente” la triangulación de bienes chinos utilizando a México como vía de entrada a Estados Unidos. El tema se encamina a ser el gran nudo de la próxima revisión del acuerdo comercial TMEC
Isabella Cota - México - El País
La reciente imposición por parte de la Casa Blanca de aranceles del 50% a 18.000 millones de dólares en productos chinos es una doble señal. Por una parte, el presidente Joe Biden escala la guerra comercial contra la economía asiática para demostrar que no teme defender los intereses de su electorado. Por otra, es una señal dirigida también a México con este mensaje: la inversión china no debe entrar al país. En eso coinciden expertos en comercio exterior, quienes anticipan que una posible triangulación de bienes chinos utilizando a México para entrar a Estados Unidos se encamina a ser el tema central en la próxima revisión del acuerdo comercial norteamericano, el TMEC, en 2026.
En conferencia de prensa el martes, la representante comercial de EE UU, Katherine Tai, dijo a periodistas que estaba preocupada por la relación comercial de México con China y que debían “estar atentos” a futuras medidas adicionales a los aranceles anunciados. “El patrón que se está desarrollando es uno que nos preocupa seriamente, y en la Representación Comercial estamos analizando todas nuestras herramientas para ver cómo podemos abordar el problema”, dijo Tai. A pesar de que los aranceles anunciados por el Gobierno estadounidense comprenden una gama de productos desde semiconductores hasta baterías, el enfoque está en los vehículos eléctricos (VE). La china BYD se convirtió este año en la más grande armadora de VE en el mundo, lo que representa una amenaza a las automotrices estadounidenses. México es fuerza exportadora de autopartes y vehículos a EE UU y empresas chinas, incluyendo BYD, han expresado interés en abrir fábricas en México. Esto ha encendido las alertas en EE UU.