viernes, 13 de julio de 2012

LO QUE SIGUE...


Cristina Ruíz de Velazco / El Financiero
A partir de las elecciones del pasado 2 de julio podemos analizar cuál será la composición del Congreso de la Unión. Sin embargo, aunque ya está visto que habrá un cambio importante, se debe tener en cuenta que el IFE todavía no determina el número de legisladores que tendrá cada grupo parlamentario, por lo cual las cifras que se presentan sobre la composición del Congreso en la LXII legislatura son cálculos preliminares que deben ser tomados como tales.
La Cámara de Diputados se integra con 300 diputados electos por el principio de mayoría relativa en igual número de distritos uninominales y 200 diputados electos por el principio de representación proporcional.
La LXI Legislatura en la Cámara de Diputados, que inició el 1º de septiembre de 2009 y que terminará el 31 de agosto de 2012, se compone de la siguiente manera: PRI 240; PAN 142; PRD 63; PVEM 23; PT 14; Panal 8; Convergencia 6 y otros 6 diputados independientes.
Para la siguiente Legislatura, las curules de los diputados quedarán: PRI 207; PAN 114; PRD 101; PVEM 33; PT 19; Movimiento Ciudadano 16; Panal 10.
Como podemos ver, los partidos políticos pequeños se vieron beneficiados en esta elección. Y aunque Andrés Manuel López Obrador estuvo lejos de ganar la Presidencia (la diferencia fue de más de 3 millones de votos), su campaña logró posicionar muy bien a los partidos que lo postularon en las dos Cámaras. El PVEM y el Panal serán el fiel de la balanza en la Cámara, ya que el PRI no pudo lograr mayoría.
El Senado se integra por 128 senadores: 64 electos por el principio de mayoría relativa, 32 por el principio de minoría y 32 por la vía de la representación proporcional mediante una lista nacional. En la LXI Legislatura, la Cámara de Senadores se compone así: PAN 50; PRI 32; PRD 23; PVEM 8; Convergencia 5; PT 5; Panal 3 y 2 más independientes.
Para la LXII Legislatura, la composición será: PRI 52; PAN 38; PRD 22; PVEM 9; PT 4; Movimiento Ciudadano 2 y Panal 1.
El siguiente momento del proceso electoral es el que corresponde al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), instancia constitucionalmente responsable de resolver, “en forma definitiva e inatacable”, las impugnaciones que se presenten respecto de las elecciones para Presidente, senadores y diputados federales. Los partidos y coaliciones tienen hasta el jueves de la presente semana para presentar dichas impugnaciones.
El propio jueves sabremos el sentido que tomará la impugnación que presentará la coalición que postuló a Andrés Manuel López Obrador. Se ha anticipado que buscarán que se anule toda la elección presidencial.
Independientemente de todo, debemos reconocer al IFE y su gran trabajo para llevar a cabo estas elecciones de una forma ordenada y transparente. Como ejercicio de contraste, vale la pena recordar al IFE de las elecciones del 2006, que durante el proceso de las campañas fue muy protagónico pero débil en la entrega de resultados. El IFE actual --con un perfil bajo-- demostró una gran fortaleza y un excelente manejo de la comunicación antes, durante y hasta el día de hoy.
De igual modo, hay que reconocer a los ciudadanos que se encargaron del desarrollo de la jornada electoral y del conteo de votos, así como a los ciudadanos que salieron a votar y que vencieron las tendencias de abstencionismo que se venían presentando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario