viernes, 27 de julio de 2012

¡NI LA BURLA PERDONAS, BABATS!

Luis Soto / El Financiero
 
Después de la exhibida urbi et orbi de que México se constituyó en el más grande "lavadero de dólares", de la humillación para el país, del escarnio por el caso de HSBC, de la vergüenza... el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, Guillermo Babatz, pretende calmar la indignación de la sociedad y de la opinión pública con una miserable multa -miserable si la comparamos con las ganancias que pudo haber obtenido ese banco por las transacciones de siete mil millones de verdes- a ese banco, y de paso darle carpetazo al asunto.
Dice la información oficial de la mencionada Comisión que impuso un total de 1,855 multas a HSBC "por haber incurrido en diversos incumplimientos a la normatividad de Prevención de Lavado de Dinero. Multas que suman un monto total de $368,921'258 (trescientos sesenta y ocho millones novecientos veintiún mil doscientos cincuenta y ocho pesos), el cual fue cubierto el día de hoy por la institución. En conjunto, esta es la mayor sanción impuesta por la CNBV a un intermediario en lo particular".
¡Ni la burla perdonas, Babatz!, exclaman los indignados, quienes hacen cuentas y exponen: El mencionado banco permitió el "lavado y planchado" de siete mil millones de dólares; supongamos que por cada dólar que pasó por la "lavadora de 2 patas" obtuvo una ganancia de 50 centavos, la utilidad debió haber sido de algunos miles de millones de pesos, ¿no? Y le avientan una multita que no llega a los 380 millones de pesos, ya con sus actualizaciones. ¡Pues como que no tienen lo que dijo Nelson, verdad!
Peor se las cuento, acota el columnista: la CNBV afirma que las infracciones cometidas por HSBC se detectaron durante dos visitas de supervisión realizadas por la CNBV de julio a octubre de 2007 y de julio a octubre de 2008, donde descubrieron deficiencias importantes en la apertura e integración de los expedientes de identificación de clientes con cuentas en dólares; omisiones en la aplicación de medidas reforzadas para clientes de alto riesgo con cuentas en dólares; fallas en el proceso de detección, análisis y reporte de operaciones inusuales; reporte extemporáneo del 55 por ciento de las operaciones inusuales del último, entre otras cositas.
La información oficial también menciona que en visitas de inspección al HSBC entre 2002 y 2007 se detectaron ciertas fallitas administrativas de las cuales se desprendieron sanciones y medidas correctivas en materia del PLD ("lavado y planchado" de dinero, para familiarizarnos, acota el columnista).
"Con estas sanciones la Comisión reitera su compromiso por hacer cumplir la regulación del Sistema Financiero Mexicano y por salvaguardar su integridad", concluye el comunicado oficial, que a juicio de algunos cuentahabientes de la institución constituye algo así como una mentada de madre.
¿Y qué hubiera ocurrido si el Subcomité de Investigaciones del Senado de Estados Unidos no nos hubiera informado (como lo hizo el 17 de julio pasado) que en México el HSBC operaba una de las más grandes "lavanderías", y proporcionado los detalles de las operaciones, así como las fallas y omisiones, e incluso posible contubernio de los ejecutivos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores? Pues el señor Babatz lo hubiera tapado por los siglos de los siglos, pues cada vez que alguien le pregunta a los funcionarios de esa Comisión y a los voceros oficiales y oficiosos sobre algún asunto relacionado con operaciones sospechosas que realizan no sólo los bancos comerciales sino también los bancos de fomento, salen con el cuento de que no pueden otorgar ninguna información porque la investigación, juicio, demanda... no ha concluido. ¡Buenos para nada!, piensan algunos, y con justa razón.
Para quienes lo hayan olvidado o no lo sabían, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público es una de las tres principales instancias que participan en la prevención y combate al "lavado" de dinero y financiamiento al terrorismo; coadyuva mediante el análisis de operaciones financieras y económicas, así como con la regulación y supervisión de instituciones obligadas a reportar operaciones, las cuales están a cargo de las diversas unidades e instancias que integra o coordina: la Unidad de Inteligencia Financiera; las distintas unidades coordinadoras y reguladoras del sistema financiero adscritas en la Subsecretaría del ramo; el Servicio de Administración Tributaria; la Comisión Nacional Bancaria y de Valores; la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas; y la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro.
Ante lo sucedido en HSBC y los argumentos de varios funcionarios de esas "unidades e instancias", cualquiera podría pensar que de todas no se hace una.
¡Si no puedes, renuncia Babatz!, gritan los indignados. ¡Ya para qué, si faltan cuatro meses para que concluya la actual administración!, dirán algunos. ¿Y qué tal si repite? Pues si así fuera, entonces todos los bancos van a pedirle permiso para poner una "lavandería". Piensan los ingenuos. ¡Permiso para qué, si sale más barato pagar una multita, inclusive con recargos!
Agenda previa
Pregunta ociosa para los integrantes del "Sugar Task Force" de Los Pinos, una vez que decidieron cómo vender los nueve ingenios que mal administra el FEESA: ¿Qué va a pasar con el Grupo Santos con quien supuestamente estaban negociando una deuda de varios cientos de millones de dólares? ¿Van a mandar a Reno al "Betito"? ¿Van a hacerle una rebajita? ¿Le dejarán el asunto a la próxima administración?

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