Samuel García / 24 Horas El Diario Sin Límites
Inusual aunque deseable. En México no estamos acostumbrados al
debate abierto de posiciones contrarias entre dos funcionarios de alto
nivel, por eso llama la atención cuando ocurre.
Es el caso de Guillermo Ortiz y Francisco Gil Díaz, dos prominentes ex secretarios de Hacienda, quienes se han trenzado en un debate público en las páginas del diario Reforma sobre la presencia mayoritaria de la banca extranjera en México y sus efectos sobre la economía.
Ambos son priístas, economistas formados en escuelas de pensamiento
con fuerte rivalidad y con una notable influencia en el entorno cercano
al candidato priísta Enrique Peña Nieto.
El debate lo inició Guillermo Ortiz con un artículo que publicó en el diario británico Financial Times
el 5 de marzo en el que el ex gobernador del Banco de México lanzó un
dardo: La banca extranjera asentada en México transfiere a sus matrices
grandes cantidades de recursos, vía dividendos por ganancias o vía
capital, sin comprometerse con el crecimiento de largo plazo del país,
por lo que se requieren implementar medidas para acotar estas acciones.
Las respuestas no se hicieron esperar. El presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, Guillermo Babatz,
refutó estos argumentos en una entrevista en la que insistió que era
peligroso cuestionar la propiedad de los bancos y mucho menos cambiar
las reglas a la inversión. “Si cumplen las reglas, porqué cuestionar qué
hacen con sus ganancias”, me dijo Babatz en aquella ocasión.
Días después Eduardo Fernández, quien fuera
presidente de la CNBV durante la crisis financiera de 1995, recordó que
fue Ortiz quien abrió el sector bancario al capital extranjero. “(Ortiz)
era el secretario de Hacienda en ésa época de crisis y le llevó al
Presidente Ernesto Zedillo para su firma la iniciativa
de ley en la que se decidió acelerar la apertura financiera y eliminar
la salvaguarda que protegía, precisamente, que Banamex y Bancomer
pasaran a manos de extranjeros”.
Sin embargo la crítica de Guillermo Ortiz a la banca extranjera no
cesó, como lo atestiguan las entrevistas que concedió a la prensa en los
días previos a la reunión anual de los banqueros.
El lunes 21 de mayo Francisco Gil Díaz publicó un artículo en Reforma en el que criticó duramente los argumentos planteados por Ortiz en el Financial Times y a los que calificó de erróneos, miopes, populistas, provincianos, parciales, incompletos y amnésicos.
Ayer lunes Guillermo Ortiz respondió en Reforma a Gil Díaz a
quien llama ‘mi amigo’, pero no deja pasar la oportunidad para señalar
lo que considera son las motivaciones que impulsan la respuesta de Gil
Díaz: “Como Secretario de Hacienda, Paco fue el artífice de la
estructura actual del sistema bancario mexicano (quizá por eso le gustó
tanto mi artículo), pues durante su gestión cuatro bancos extranjeros
(BBVA, Citi, HSBC y Scotiabank) adquirieron el control de grandes bancos
mexicanos. Ya en el sector privado, Paco es hoy consejero de
BBVA-Bancomer y capitán en México de Telefónica (en donde BBVA tiene una
importante participación accionaria)”, dice Ortiz.
Siempre será deseable el debate de contraste de posiciones en temas
relevantes como éste, pero el debate planteado por Ortiz parece más
asentado en el terreno del prestigio y la vanidad personal que en el
terreno genuino de las políticas públicas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario