La baja demanda en el mercado interno afecta a las empresas, dice Concamin
Ramiro Alonso / El Universal
La Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin) advirtió que 46% de la planta productiva en el sector fabril está ociosa.
De acuerdo con la más reciente Encuesta Mensual de Opinión Empresarial, aplicada por el INEGI a poco más de 500 empresas, la industria manufacturera disminuyó el grado de utilización de su planta y equipo disponibles a 54% en el mes de julio, aseguró el organismo.
“En el arranque del segundo semestre del año parece debilitar la actividad del sector fabril mexicano”, dijo la Concamin en un comunicado.
La inactividad significa que el sector industrial continúa operando con un porcentaje de capacidad ociosa, debido a que la demanda por sus productos avanza lentamente en el mercado interno, como resultado de la cautela prevaleciente en el consumidor, dijo el organismo.
La Confederación aseguró que aunque se trata de un descenso moderado en relación al mes anterior (en junio el dato fue de 54.5%), constituye el segundo retroceso mensual consecutivo.
Priorizar inversiones público-privadas
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) pidió al Congreso apresurar la agenda para que en el siguiente periodo de sesiones, los trabajos se enfoquen en crear un marco jurídico que fomente la inversión público-privada.
“Es una paradoja que habiendo escasez de recursos presupuestales y una carencia importante de servicios de infraestructura para estimular el desarrollo nacional y la competitividad, en México no contemos con un marco que fomente las inversiones”, dijo Mario Sánchez, presidente del CCE.
El representante de la IP dijo que la construcción de infraestructura pública, bajo un esquema de participación compartida entre el sector gubernamental y las empresas privadas, “es una posibilidad que debemos consolidar mediante un marco jurídico equiparable al de las mejores prácticas internacionales”.
La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) dijo que el sector industrial está comprometido a promover la adquisición de una nueva cultura empresarial, cuyo elemento fundamental sea una lógica de producción sustentada en la elevación permanente de los niveles de productividad y competitividad de la planta industrial.
La representación industrial dijo que se necesitan herramientas para competir mejor, “no instrumentos que nos aíslen de la competencia”.
Ramiro Alonso / El Universal
La Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin) advirtió que 46% de la planta productiva en el sector fabril está ociosa.
De acuerdo con la más reciente Encuesta Mensual de Opinión Empresarial, aplicada por el INEGI a poco más de 500 empresas, la industria manufacturera disminuyó el grado de utilización de su planta y equipo disponibles a 54% en el mes de julio, aseguró el organismo.
“En el arranque del segundo semestre del año parece debilitar la actividad del sector fabril mexicano”, dijo la Concamin en un comunicado.
La inactividad significa que el sector industrial continúa operando con un porcentaje de capacidad ociosa, debido a que la demanda por sus productos avanza lentamente en el mercado interno, como resultado de la cautela prevaleciente en el consumidor, dijo el organismo.
La Confederación aseguró que aunque se trata de un descenso moderado en relación al mes anterior (en junio el dato fue de 54.5%), constituye el segundo retroceso mensual consecutivo.
Priorizar inversiones público-privadas
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) pidió al Congreso apresurar la agenda para que en el siguiente periodo de sesiones, los trabajos se enfoquen en crear un marco jurídico que fomente la inversión público-privada.
“Es una paradoja que habiendo escasez de recursos presupuestales y una carencia importante de servicios de infraestructura para estimular el desarrollo nacional y la competitividad, en México no contemos con un marco que fomente las inversiones”, dijo Mario Sánchez, presidente del CCE.
El representante de la IP dijo que la construcción de infraestructura pública, bajo un esquema de participación compartida entre el sector gubernamental y las empresas privadas, “es una posibilidad que debemos consolidar mediante un marco jurídico equiparable al de las mejores prácticas internacionales”.
La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) dijo que el sector industrial está comprometido a promover la adquisición de una nueva cultura empresarial, cuyo elemento fundamental sea una lógica de producción sustentada en la elevación permanente de los niveles de productividad y competitividad de la planta industrial.
La representación industrial dijo que se necesitan herramientas para competir mejor, “no instrumentos que nos aíslen de la competencia”.
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