La crisis económica global desgastó más la calidad del empleo en el país. Al cierre del año pasado, la ocupación en el sector informal y la subocupación registraron incrementos con relación a 2008, de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía
Ixel Yutzil González / El Universal
La crisis económica global desgastó más la calidad del empleo en el país. Al cierre del año pasado, la ocupación en el sector informal y la subocupación registraron incrementos con relación a 2008, de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo al cuarto trimestre del año pasado detallaron que la ocupación en el sector informal aumentó en el país al agrupar a 12.6 millones de personas al cuarto trimestre de 2009; un repunte de 938 mil personas respecto al cierre de 2008 (8% de crecimiento anual).
Con ello, 28.3% de los trabajadores del país laboraron en el sector informal; un nivel no visto desde 2005. Tan sólo, entre el tercer y el cuarto trimestre de 2009, el número de personas ocupadas en la informalidad subió en 241 mil.
Datos del INEGI revelaron que las personas que estuvieron disponibles para laborar más tiempo como consecuencia de paros técnicos, y menores horas trabajadas por limitaciones del mercado laboral, aumentó.
A diciembre pasado, un total de 3.9 millones de personas se encontraron subocupadas, cifra equivalente a 8.8% del total de ocupados del país.
Un año atrás, los subocupados representaron 7% de los ocupados del país, por lo que entre 2008 y 2009, el número de personas que requirieron un empleo adicional para compensar ingresos creció en 816 mil personas.
Gran obstáculo
Juan Sherwell, director de la Escuela de Graduados en Administración y Dirección de Empresas (EGADE) del Instituto Tecnológico de Monterrey, estado de México, comentó que preocupa la calidad del empleo en el país, pues si se suma a la población subempleada, la ocupada en el sector informal y la población desempleada, se tienen 19 millones de personas (40% de la fuerza laboral del país) en condiciones poco favorales para la economía.
“Esta situación definitivamente no es buena, pues las personas subempleadas añaden poco al PIB, ya que aunque quieran trabajar más no pueden; los desempleados no añaden nada al PIB; y los ocupados informales no pagan impuestos”, agregó.
Datos adicionales de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI detallaron que la calidad del empleo en México se deterioró más el año pasado.
A diciembre de 2009, cerca de 28 millones 678 mil personas laboraron sin tener acceso a instituciones de salud, lo que significa que 64% de los trabajadores del país laboró bajo estas condiciones. En 2008, 62% de los ocupados se encontraron en esta situación.
Menos presiones
El desempleo en el país moderó en el cuarto trimestre la fuerza con que creció durante el punto más álgido de la recesión económica que se observó en septiembre de 2009.
En el cuarto trimestre del año pasado, 2 millones 506 mil personas estuvieron desempleadas, por lo que la tasa de desocupación fue de 5.3%.
Este porcentaje de la Población Económicamente Activa (PEA) es superior al 4.3% alcanzado en igual trimestre de 2008 e implica que en el lapso de un año, el desempleo en el país aumentó en 584 mil personas, respecto a las 1.9 millones de personas que estuvieron desempleadas al cierre de 2008.
Juan Sherwell estimó que a partir de la segunda mitad de este año la tasa de desempleo regresará a los niveles previos a la crisis, y al cierre de 2010 se podrán crear entre 350 mil y 400 mil nuevas plazas laborales aseguradas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), si el PIB crece entre 3 y 3.5%. De crecer 4%, se generarían entre 400 y 450 mil plazas.
La crisis económica global desgastó más la calidad del empleo en el país. Al cierre del año pasado, la ocupación en el sector informal y la subocupación registraron incrementos con relación a 2008, de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo al cuarto trimestre del año pasado detallaron que la ocupación en el sector informal aumentó en el país al agrupar a 12.6 millones de personas al cuarto trimestre de 2009; un repunte de 938 mil personas respecto al cierre de 2008 (8% de crecimiento anual).
Con ello, 28.3% de los trabajadores del país laboraron en el sector informal; un nivel no visto desde 2005. Tan sólo, entre el tercer y el cuarto trimestre de 2009, el número de personas ocupadas en la informalidad subió en 241 mil.
Datos del INEGI revelaron que las personas que estuvieron disponibles para laborar más tiempo como consecuencia de paros técnicos, y menores horas trabajadas por limitaciones del mercado laboral, aumentó.
A diciembre pasado, un total de 3.9 millones de personas se encontraron subocupadas, cifra equivalente a 8.8% del total de ocupados del país.
Un año atrás, los subocupados representaron 7% de los ocupados del país, por lo que entre 2008 y 2009, el número de personas que requirieron un empleo adicional para compensar ingresos creció en 816 mil personas.
Gran obstáculo
Juan Sherwell, director de la Escuela de Graduados en Administración y Dirección de Empresas (EGADE) del Instituto Tecnológico de Monterrey, estado de México, comentó que preocupa la calidad del empleo en el país, pues si se suma a la población subempleada, la ocupada en el sector informal y la población desempleada, se tienen 19 millones de personas (40% de la fuerza laboral del país) en condiciones poco favorales para la economía.
“Esta situación definitivamente no es buena, pues las personas subempleadas añaden poco al PIB, ya que aunque quieran trabajar más no pueden; los desempleados no añaden nada al PIB; y los ocupados informales no pagan impuestos”, agregó.
Datos adicionales de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI detallaron que la calidad del empleo en México se deterioró más el año pasado.
A diciembre de 2009, cerca de 28 millones 678 mil personas laboraron sin tener acceso a instituciones de salud, lo que significa que 64% de los trabajadores del país laboró bajo estas condiciones. En 2008, 62% de los ocupados se encontraron en esta situación.
Menos presiones
El desempleo en el país moderó en el cuarto trimestre la fuerza con que creció durante el punto más álgido de la recesión económica que se observó en septiembre de 2009.
En el cuarto trimestre del año pasado, 2 millones 506 mil personas estuvieron desempleadas, por lo que la tasa de desocupación fue de 5.3%.
Este porcentaje de la Población Económicamente Activa (PEA) es superior al 4.3% alcanzado en igual trimestre de 2008 e implica que en el lapso de un año, el desempleo en el país aumentó en 584 mil personas, respecto a las 1.9 millones de personas que estuvieron desempleadas al cierre de 2008.
Juan Sherwell estimó que a partir de la segunda mitad de este año la tasa de desempleo regresará a los niveles previos a la crisis, y al cierre de 2010 se podrán crear entre 350 mil y 400 mil nuevas plazas laborales aseguradas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), si el PIB crece entre 3 y 3.5%. De crecer 4%, se generarían entre 400 y 450 mil plazas.
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