Alejandro Durán / El Sol de México
En virtud de que 50 por ciento de las micro, pequeñas y medianas empresas (PyMEs) que se abren en México cierran en el primer año de actividad y 75 en los primeros dos, el sector patronal propuso la creación de un organismo descentralizado, no sectorizado, que se haría responsable del Fondo Pyme y los demás programas destinados a dichos negocios.
En este sentido, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), presentó un plan integral para apoyar a las MiPyMEs bajo la óptica de que sin ellas resultará imposible generar los 800 mil empleos indispensables que deben generarse en el país anualmente, toda vez que representan el 99.9 por ciento de la planta productiva.
De esta manera, el presidente del organismo, Gerardo Gutiérrez Candiani, propuso poner en marcha un plan efectivo y focalizado a apoyar a dicho sector, pues resulta lamentable que las PyMEs generen el 78 por ciento del empleo en México, pero registran una productividad laboral de 20 por ciento en comparación con las grandes empresas, cuando en los países desarrollados, esa relación llega a 80 por ciento.
"En México, el desarrollo de la Pymes debe ser una prioridad estratégica: es la principal fuente de empleos actual y la que más puede generar en el corto, mediano y largo plazos; es vital establecer las condiciones para que se desarrollen", aseguró.
Así, a través de un videomensaje, el presidente de la Coparmex propuso un relanzamiento de la banca de desarrollo, que significaría un apoyo decidido para las PyMEs mexicanas así como la creación de un organismo descentralizado, no sectorizado, que se haría responsable del Fondo Pyme y los demás programas destinados a estas empresas, para brindar asesoría integral y garantías por proyecto a los empresarios, a fin de que puedan buscar financiamiento accesible.
"Bajo esta fórmula, se subsanarían los problemas actuales de dispersión de esfuerzos, mal uso de garantías, falta de promoción en la banca de desarrollo y la lentitud con la que fluye el crédito, que va en contra de la reactivación del mercado interno", argumentó.
Asimismo, planteó que exista un instituto, desconcentrado de la Secretaría de Hacienda, encargado del análisis de riesgo y la valoración de los intermediarios de la banca de desarrollo, es decir, sería el encargado de acreditar a estos intermediarios y establecer estándares de capitalización, desarrollo y competencia en el sector.
De igual manera, dijo que resulta necesario promover entre las PyMEs una mayor vinculación empresa-escuela, más capacitación y una cultura de innovación, para aprovechar la flexibilidad con que cuentan.
También sugirió generar mayores incentivos fiscales y menos requisitos para que inviertan y generen empleos en la economía formal, es decir, deben simplificarse los trámites que enfrentan las Pymes para iniciar actividades y operar, incluyendo los fiscales.
En virtud de que 50 por ciento de las micro, pequeñas y medianas empresas (PyMEs) que se abren en México cierran en el primer año de actividad y 75 en los primeros dos, el sector patronal propuso la creación de un organismo descentralizado, no sectorizado, que se haría responsable del Fondo Pyme y los demás programas destinados a dichos negocios.
En este sentido, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), presentó un plan integral para apoyar a las MiPyMEs bajo la óptica de que sin ellas resultará imposible generar los 800 mil empleos indispensables que deben generarse en el país anualmente, toda vez que representan el 99.9 por ciento de la planta productiva.
De esta manera, el presidente del organismo, Gerardo Gutiérrez Candiani, propuso poner en marcha un plan efectivo y focalizado a apoyar a dicho sector, pues resulta lamentable que las PyMEs generen el 78 por ciento del empleo en México, pero registran una productividad laboral de 20 por ciento en comparación con las grandes empresas, cuando en los países desarrollados, esa relación llega a 80 por ciento.
"En México, el desarrollo de la Pymes debe ser una prioridad estratégica: es la principal fuente de empleos actual y la que más puede generar en el corto, mediano y largo plazos; es vital establecer las condiciones para que se desarrollen", aseguró.
Así, a través de un videomensaje, el presidente de la Coparmex propuso un relanzamiento de la banca de desarrollo, que significaría un apoyo decidido para las PyMEs mexicanas así como la creación de un organismo descentralizado, no sectorizado, que se haría responsable del Fondo Pyme y los demás programas destinados a estas empresas, para brindar asesoría integral y garantías por proyecto a los empresarios, a fin de que puedan buscar financiamiento accesible.
"Bajo esta fórmula, se subsanarían los problemas actuales de dispersión de esfuerzos, mal uso de garantías, falta de promoción en la banca de desarrollo y la lentitud con la que fluye el crédito, que va en contra de la reactivación del mercado interno", argumentó.
Asimismo, planteó que exista un instituto, desconcentrado de la Secretaría de Hacienda, encargado del análisis de riesgo y la valoración de los intermediarios de la banca de desarrollo, es decir, sería el encargado de acreditar a estos intermediarios y establecer estándares de capitalización, desarrollo y competencia en el sector.
De igual manera, dijo que resulta necesario promover entre las PyMEs una mayor vinculación empresa-escuela, más capacitación y una cultura de innovación, para aprovechar la flexibilidad con que cuentan.
También sugirió generar mayores incentivos fiscales y menos requisitos para que inviertan y generen empleos en la economía formal, es decir, deben simplificarse los trámites que enfrentan las Pymes para iniciar actividades y operar, incluyendo los fiscales.
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