Productores denunciaron que una gran cantidad de mercancías chinas que ingresan al país tienen subvaluación, con lo que evaden el pago de impuestos. Foto: AP
Alejandro Durán / El Sol de México
Ciudad de México.- Derivado de un incremento de 35 por ciento en las importaciones, principalmente de China, a la industria del vestido le avizora un "panorama aterrador" para 2012, pues tan sólo en el primer trimestre del año se perderán 15 mil empleos y 449 empresas del sector.
En este sentido, la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canive) reconoció que se dispararán las importaciones provenientes del país asiático una vez que el pasado 12 de diciembre se les bajó la tasa arancelaria, por lo que el mercado nacional podría saturarse aún más con productos de baja calidad y a precios raquíticos.
Y lo anterior, argumentó el dirigente del organismo, Marcos Cherem, porque cuatro de cada 10 prendas chinas que ingresan al país lo hacen a menos de un dólar, costo que ni siquiera, subrayó, cubre el costo de las materias primas, tal es el caso de brasieres que son reportados en la aduana a menos de un centavo de dólar, pero son vendidos al público mexicano a 80 pesos, práctica que se le conoce como subvaluación de productos.
Por ello, el empresario reconoció que a la industria del vestido le espera un 2012 no muy halagador, en donde las principales vertientes serán números negativos.
Y lo que sucede, precisó el empresario en conferencia de prensa, es que al cierre de este 2011 la industria del vestido caerá 3.6 por ciento, lo que implicará la pérdida de poco más de dos mil empleos, así como el cierre de 239 empresas.
Sin embargo, por si no fuera suficiente, advirtió que para el próximo año se espera un escenario más desolador, pues tan sólo para los tres primeros meses del 2012 la producción caerá 10 por ciento, se perderán 15 mil empleos para sumar un total de 291 mil 105 plazas y se perderán 449 empresas, para arrojar un saldo total de ocho mil 531 negocios, derivado de un repunte de 35 por ciento de las importaciones.
Lo anterior, porque el pasado 12 de diciembre terminaron las medidas de transición comercial, que incluyen la reducción de aranceles a las importaciones provenientes china, y que pactaron los gobiernos de México y China desde 2001, tras el ingreso del país asiático a la Organización Mundial de Comercio, (OMC).
"Con este escenario, no podemos avizorar cómo se comportará el sector durante todo 2012, sería irresponsable hacer un pronóstico para todo el año; vamos a estar monitoreando cada semana el comportamiento de las importaciones chinas", señaló.
Por lo anterior, dijo que si las autoridades del país no están cubriendo con las expectativas, entonces now queda más que sean los propios empresarios mexicanos quienes busquen a sus homólogos chinos con el fin de buscar una solución conjunta al fenómeno de la subvaluación, contrabando, triangulación y piratería.
En este sentido, la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canive) reconoció que se dispararán las importaciones provenientes del país asiático una vez que el pasado 12 de diciembre se les bajó la tasa arancelaria, por lo que el mercado nacional podría saturarse aún más con productos de baja calidad y a precios raquíticos.
Y lo anterior, argumentó el dirigente del organismo, Marcos Cherem, porque cuatro de cada 10 prendas chinas que ingresan al país lo hacen a menos de un dólar, costo que ni siquiera, subrayó, cubre el costo de las materias primas, tal es el caso de brasieres que son reportados en la aduana a menos de un centavo de dólar, pero son vendidos al público mexicano a 80 pesos, práctica que se le conoce como subvaluación de productos.
Por ello, el empresario reconoció que a la industria del vestido le espera un 2012 no muy halagador, en donde las principales vertientes serán números negativos.
Y lo que sucede, precisó el empresario en conferencia de prensa, es que al cierre de este 2011 la industria del vestido caerá 3.6 por ciento, lo que implicará la pérdida de poco más de dos mil empleos, así como el cierre de 239 empresas.
Sin embargo, por si no fuera suficiente, advirtió que para el próximo año se espera un escenario más desolador, pues tan sólo para los tres primeros meses del 2012 la producción caerá 10 por ciento, se perderán 15 mil empleos para sumar un total de 291 mil 105 plazas y se perderán 449 empresas, para arrojar un saldo total de ocho mil 531 negocios, derivado de un repunte de 35 por ciento de las importaciones.
Lo anterior, porque el pasado 12 de diciembre terminaron las medidas de transición comercial, que incluyen la reducción de aranceles a las importaciones provenientes china, y que pactaron los gobiernos de México y China desde 2001, tras el ingreso del país asiático a la Organización Mundial de Comercio, (OMC).
"Con este escenario, no podemos avizorar cómo se comportará el sector durante todo 2012, sería irresponsable hacer un pronóstico para todo el año; vamos a estar monitoreando cada semana el comportamiento de las importaciones chinas", señaló.
Por lo anterior, dijo que si las autoridades del país no están cubriendo con las expectativas, entonces now queda más que sean los propios empresarios mexicanos quienes busquen a sus homólogos chinos con el fin de buscar una solución conjunta al fenómeno de la subvaluación, contrabando, triangulación y piratería.
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