viernes, 3 de junio de 2011

PIDE COMCE PRIORIZAR EL TEMA DE LA INSEGURIDAD


Valentín Díez Morodo, presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior. Foto: OEM-Informex

Alejandro Durán / Enviado

Valentín Díez Morodo, presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior (Comce), advirtió que la violencia generada por el combate al crimen organizado no cesará en el corto plazo, por lo que llamó a autoridades, legisladores y sobre todo a secretarios de Estado dejar de distraerse en sus aspiraciones presidenciales y atender los grandes pendientes que arrastra el país, que pudieran precisamente acelerar la recuperación de la estabilidad social.
De esta manera, el empresario dijo que sólo a través de un crecimiento económico sostenido de 5 por ciento anual es como se podrán generar las oportunidades suficientes para crear empleos y riqueza para un país cuya mitad de la población está sumergida en la pobreza.
En este sentido, dijo que lo más oportuno para el país es que los distintos funcionarios públicos y representantes populares no se distraigan en temas electorales, pues lamentó que a más de un año de distancia de las elecciones presidenciales de 2012, distintos secretarios de Estado ya estén haciendo públicas sus aspiraciones y dejen a un lado los grandes pendientes, como la consumación de las reformas laboral y fiscal.
"Mi mensaje directo como empresario, a todos los políticos en nuestro país, es que estamos en momentos de hacer a un lado todas las tendencias partidistas, que pensemos en sacar adelante las reformas que están estancadas y de esa forma a todos nos va a ir bien; y sí, efectivamente el aspecto electoral se ha llevado de una manera más intensa de lo debido, distrayendo quizás otras prioridades que existen en muchos de los estados. Creo que son muy anticipados, desconciertan a la gente, debemos concentrarnos más en lo que estamos viendo, que el país siga creciendo, no es el momento de pensar en otra cosa", comentó.
Consultado luego de la inauguración del XVIII Convención de Comercio Exterior Mexicanos, Díez Morodo agregó que el tema del combate a la inseguridad es otro asunto que estará en la agenda nacional durante un tiempo considerable, pues se trata, advirtió, de un flagelo que se enraizó en el país durante décadas y por lo tanto su solución no será inmediata.
"No podemos negar que el factor de inseguridad es algo que definitivamente ha afectado, quiero aclarar que siguen entrando inversiones, pero la mayor preocupación que tiene todo inversionista extranjero es cómo vendrá la inseguridad y cuánto tiempo tendremos que combatirla, y no solamente combatirla, sino eliminarla; eso no va a ser en el corto plazo, tenemos que ser realistas, es algo que ya estaba tan enraizado en nuestra sociedad, que se está luchando con mucha valentía, pero no va a ser en el corto plazo", comentó.
Díez Morodo afirmó que se necesita de un estado de derecho en la operación aduanera y regulación de trámites, simplificación, mayor tecnología e innovación, así como la promoción de exportaciones de parte de las pequeñas y medianas empresas.
El empresario destacó la importancia de que haya políticas de largo plazo y equiparar los costos logísticos y de producción con los de los principales socios comerciales con los que el país compite, a fin de hacer del comercio exterior el motor del desarrollo nacional.
A lo largo de su ponencia refirió que durante la crisis de 2009 las exportaciones mundiales cayeron 23 por ciento, la peor cifra desde 1948, mientras en 2010 la recuperación alcanzó un crecimiento de 22 por ciento; las exportaciones mexicanas crecieron 30 por ciento debido al mejoramiento del mercado de América del Norte, donde México destina 83 por ciento de sus exportaciones.
"México debe aprovechar las oportunidades para posicionarse en los mercados internacionales, sobre todo el de América del Norte, pese a la dependencia que se tiene, ya que se beneficia de ventajas como la cercanía y los bajos costos de logística", señaló.
En este contexto, destacó que las exportaciones mexicanas mantienen su dinamismo durante este 2011, aunque a un "natural" ritmo inferior a 2010, año en el que las ventas al exterior registraron un atípico desempeño positivo.

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