Edgar Huérfano / El Economista
En la historia reciente, el crédito bancario no ha contribuido de manera significativa al crecimiento de la producción como se esperaría y, por el contrario, ha sido mayor el efecto que el sector productivo ha tenido en el impulso al crédito de la banca a través de la generación de más fuentes de empleo, aseguró el Banco de México.
Mediante un análisis, donde se mide la relación entre la producción y el crédito durante los últmos 30 años, el Banco de México reveló que el crédito tiene un efecto mínimo en la producción y en el mediano plazo la relación incluso se vuelve negativo.
“Aunque estos resultados no confirman una relación firme, sí son ilustrativos del papel reducido que ha jugado el crédito bancario para impulsar el crecimiento de la economía mexicana en los últimos años”, estableció el banco central en el “Reporte del Sistema Financiero 2010”.
BBVA Research dio a conocer recientemente que de acuerdo con cálculos del grupo financiero español, un incremento de 1% en el crédito total en México tiene un impacto positivo en el PIB de apenas entre 0.020 y 0.057 por ciento.
Adolfo Albo, economista de BBVA para México, detalló: “El impacto de un aumento del crédito tiene su mayor efecto sobre el PIB en el trimestre en que se da el incremento del crédito. Sin embargo, el efecto se va diluyendo a medida que pasa el tiempo hasta prácticamente desaparecer después del séptimo trimestre”.
Por su parte, Guillermo Babatz estimó que el crecimiento del crédito en el 2011 será entre 12 y 14%, debido a que se espera una mejoría en las condiciones económicas y en el consumo privado de las familias para el próximo año, luego de que el 2010 fue un año en el que los bancos trabajaron en reducir el Índice de Morosidad generado por la crisis que estalló en el 2008.
Analistas del sector bancario consideraron que la demanda de crédito en México está determinada en mayor medida por el nivel de empleo que se tenga en la economía, más que por el consumo de bienes que requieran las personas.
“Las familias no demandan crédito porque quieren comprar algo en sí mismo, sino porque saben que tendrán un ingreso seguro a mediano plazo y que podrán pagarlo. El deseo o necesidad de comprar bienes siempre estará, pero eso no es determinante en México para que las personas salgan a pedir crédito”, explicó uno de los analistas consultados.
En la historia reciente, el crédito bancario no ha contribuido de manera significativa al crecimiento de la producción como se esperaría y, por el contrario, ha sido mayor el efecto que el sector productivo ha tenido en el impulso al crédito de la banca a través de la generación de más fuentes de empleo, aseguró el Banco de México.
Mediante un análisis, donde se mide la relación entre la producción y el crédito durante los últmos 30 años, el Banco de México reveló que el crédito tiene un efecto mínimo en la producción y en el mediano plazo la relación incluso se vuelve negativo.
“Aunque estos resultados no confirman una relación firme, sí son ilustrativos del papel reducido que ha jugado el crédito bancario para impulsar el crecimiento de la economía mexicana en los últimos años”, estableció el banco central en el “Reporte del Sistema Financiero 2010”.
BBVA Research dio a conocer recientemente que de acuerdo con cálculos del grupo financiero español, un incremento de 1% en el crédito total en México tiene un impacto positivo en el PIB de apenas entre 0.020 y 0.057 por ciento.
Adolfo Albo, economista de BBVA para México, detalló: “El impacto de un aumento del crédito tiene su mayor efecto sobre el PIB en el trimestre en que se da el incremento del crédito. Sin embargo, el efecto se va diluyendo a medida que pasa el tiempo hasta prácticamente desaparecer después del séptimo trimestre”.
Por su parte, Guillermo Babatz estimó que el crecimiento del crédito en el 2011 será entre 12 y 14%, debido a que se espera una mejoría en las condiciones económicas y en el consumo privado de las familias para el próximo año, luego de que el 2010 fue un año en el que los bancos trabajaron en reducir el Índice de Morosidad generado por la crisis que estalló en el 2008.
Analistas del sector bancario consideraron que la demanda de crédito en México está determinada en mayor medida por el nivel de empleo que se tenga en la economía, más que por el consumo de bienes que requieran las personas.
“Las familias no demandan crédito porque quieren comprar algo en sí mismo, sino porque saben que tendrán un ingreso seguro a mediano plazo y que podrán pagarlo. El deseo o necesidad de comprar bienes siempre estará, pero eso no es determinante en México para que las personas salgan a pedir crédito”, explicó uno de los analistas consultados.
Obtener un crédito no es nada fácil, sobre todo en infonavit son bastante cuidadosos y siempre van a inspeccionar que la información sea veraz en todos los aspectos.
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