martes, 20 de marzo de 2012

MONUMENTO AL CENTRALISMO TRIBUTARIO

David Colmenares / Eje central
-Elevada dependencia fiscal del petroleo
-estructura fuertemente regresiva
-No hay reforma fiscal porque no hay consenso
Ya hemos visto porque la estructura tributaria mexicana es la más regresiva, centralista y la que menos incentiva la inversión de todos los miembros de la OCDE e incluso de América Latina. La misma ha estado impregnada de olores ideológicos, cuyos objetivos se resumen en incrementar la recaudación en el corto plazo, dejando de lado la promoción del desarrollo, la inversión, la creación de empleos o la competividad de nuestro aparato productivo.
Además es la política de ingresos más centralista, al quitar a las entidades federativas o gobiernos subnacionales, las potestades con potencial recaudatorio efectivo, dejándoles sólo tributos de baja recaudación como el impuesto al hospedaje, el de autos viejos, nóminas y recientemente el impuesto de tenencia de automóviles nuevos con una base depredada sustancialmente.
Por eso no hemos logrado avanzar en el tema de la reforma fiscal, el cual se usa como lugar común, sin embargo no se logrado o buscado el consenso sobre lo que es. Antes de lamentarnos sobre la falta de la misma, tendríamos que ponernos de acuerdo sobre lo que consideramos reforma fiscal y buscar los mecanismos de consenso sobre ello.
El principio ha sido, quiero reforma “pero en los huesos de mi compadre”.
Nuestra estructura tributaria es regresiva, ya que los impuestos al consumo o indirectos, el IVA y los IEPS, representan más de la mitad de la recaudación en México.
Además nuestra carga tributaria, relación impuestos /PIB, es baja tanto en OCDE como en AL, repasemos algunas perlitas de nuestro optimismo:
• La tasa más alta en la OCDE es la de Dinamarca con 48.1 % de su PIB, mientras que la de México es la menor con 17.4 %. En AL Argentina y Brasil, con cargas tributarias de 31.4 % y 32.6 % del PIB, casi doblan la de México.
• El peso de los ingresos derivados de los recursos no renovables como el petróleo, en México varía entre 38 y 40 %, mientras que en Chile, Colombia, Perú y Venezuela entre 10 y 18 %, lo que ya la OCDE considera alto.
• Los impuestos indirectos en AL son superiores al 50 %, frente al 30 % del promedio de los de la OCDE. México lo rebasa con el 51 %. El IVA representó en la región, 35 % del total, mientras que en la OCDE sólo 20 %.
• Una “mayor dependencia de los impuestos indirectos puede acarrear que el sistema tributario sea más regresivo”, señala la OCDE. Es el caso de México.
• Un monumento al centralismo de las facultades tributarias se da en México donde el Gobierno Federal no se ha preocupado por fortalecer las facultades tributarias de las entidades federativas, como si lo han hecho Brasil y Argentina. Por el contrario las ha bloqueado.
• En México siendo un país federal, sin restar seguridad social, el gobierno Federal se atribuye el 79. 6 % de los ingresos tributarios, y ¡sólo deja el 2.4 % a estados y municipios!
• Contrastando, en Brasil las facultades se distribuyen de manera diferente, 46 % y 27.3 % respectivamente; en Argentina 63.9 % y 14.7 %; e incluso en los socios federales de la OCDE los promedios son de 53.6 % y 24.4 %.
• México se acerca más al perfil de los países unitarios como Chile o Perú (86.3 % y 85.2 % respectivamente), ¡incluso la centralización es menor en los países unitarios de la OCDE, con 63.5 %!.
Lo anterior con cifras de las Estadísticas Tributarias en América Latina 1990-2009, publicadas por la OCDE, y elaboradas conjuntamente con CEPAL y el CIAT.
NORMALISTAS
Lamentable lo que han hecho desorientados, manipulados y confundidos normalistas a las sociedades de estos tres estados, violando la Ley y con peticiones como la de la plaza inmediata y sin exámenes, en sistemas educativos que no dan para más, con plantillas que por el contrario habría que depurar para evitar las dobles o múltiples plazas y ajustar los comisionados a la Ley, como ha señalado la ASF.
En Oaxaca han paralizado la Ciudad, pero han sido tratados con cortesías oficiales que no merecen. Es claro que no tienen idea de lo que piden y les vale lo que afecten a la gente. Confunden protesta social con vandalismo.
Bien por el ultimátum que anunció el Gobernador Fausto Vallejo en Michoacán. En Guerrero no supieron afrontarlo y el resultado fue desastroso y costoso. Lo que no se debe es no hacer nada. La paciencia y la tolerancia tienen límites, sólo se debe actuar sin violencia y conforme a la Ley.
*Profesor de Finanzas Estatales en la UNAM. Ha sido Titular de la Unidad de Coordinación con Entidades Federativas y Secretario de Finanzas de Oaxaca. También Presidente del Colegio Nacional de Economistas.

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