- La fiscalía de Sinaloa, a cargo de Sara Bruna, permitió la incineración del cuerpo de Héctor Melesio Cuén y falseó datos del lugar y la forma en que fue asesinado el exrector.
Pablo Hiriart - El Financiero
La caída de la fiscal general de Sinaloa, Sara Bruna, por manipular los datos del asesinato del exrector y diputado federal electo, Héctor Melesio Cuén, quema los pies del gobernador Rubén Rocha Moya.
Ella no movía la hoja de algún archivo sin la venia del gobernador, que la puso en el cargo a través de un medio propio de las mafias.
Fue la primera decisión que tomó al recibir la constancia de gobernador electo: le pidió al fiscal general del estado, Juan José Ríos Estavillo, que renunciara al cargo a pesar de que la fiscalía es ‘autónoma’ y al funcionario le faltaban tres años para concluir su encargo. Más le valía aceptar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario