Alejandro Nadal / La Jornada
La gran recesión en
Estados Unidos terminó oficialmente en el verano de 2009. En julio los
datos indicaron un crecimiento positivo que interrumpió la mala racha de
descenso iniciada con la crisis financiera de 2008. El gobierno, la
Reserva federal y la prensa de negocios anunciaron que así comenzaba la
recuperación. La bolsa de valores comenzó un periíodo de auge que
también fue presentado como signo claro de que lo peor había pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario