Ciro Murayama / El Universal
Los compromisos que adquirió Enrique Peña Nieto en su primer discurso
como presidente sólo podrán cumplirse si se rompe la inercia del bajo
crecimiento económico. Hacer realidad los derechos humanos (que incluyen
los derechos sociales) reconocidos en la Constitución, cerrar las
brechas de la desigualdad social y crear un país incluyente, capaz de
generar las oportunidades de empleo que nuestra demografía permite y
exige, implica que crezcamos a tasas mucho mayores a las de las últimas
tres décadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario