- La granja comienza a revolverse y la rebelión puede estar más cercana de lo que piensan quienes siempre se han creído impunes
No hay nadie en este país que se haya hecho rico por sí mismo. Nadie.
¿Construye una factoría en este o aquel lugar? Bueno para usted. Seamos
claros: transporta sus mercancías al mercado por carreteras que pagamos
los demás. Contrata trabajadores cuya educación hemos pagado todos. Está
seguro en su fábrica porque los demás hemos pagado por la policía o los
bomberos. No tiene por qué preocuparse de las bandas de malhechores que
podrían amenazar sus instalaciones... Mire, usted levanta su
instalación y ¿se le vuelve en algo terrorífico, o en una gran idea? Que
Dios le bendiga. Tome, una buena parte de lo que hicimos entre todos.
Pero en esa parte hay un contrato social subyacente: de ese bocado hay
que pagar para el futuro, para que el próximo chaval que viene tenga
oportunidades... Sin policía, escuelas, carreteras, bomberos, y todo lo
demás, ¿dónde estarían las grandes empresas, los selfmade multimillonarios? Para que el capitalismo funcione todos y cada uno necesitamos del otro, de los demás”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario