sábado, 12 de abril de 2025

El dolor de los desaparecidos

Serpientes y Escaleras 

Salvador García Soto - Expreso

La voz del hombre recio, alto y de barba canosa se quebró y lloró como un niño: “Yo sé licenciada Rosa Icela que usted y la presidenta van a cambiar esta historia y nos van a ayudar para que regresen a nuestras casas nuestros tesoros (sollozos). Y aunque sea un huesito para tenerlo y saber que están ahí, porque un hombre y una mujer están cansados, sus padres, de esto que estamos viviendo. Y que nuestros niños, nuestros hijos van a regresar. Un huesito aunque sea que nos den, para darles cristiana sepultura. Es lo único que pedimos si ya no están aquí”.

Gustavo Hernández, de Escobedo, Nuevo León, pedía entre lágrimas y sollozos, con el corazón destrozado de tanto buscar a su hijo Abraham Zeydi Hernández del Raso, que la secretaria de Gobernación le ayudara a encontrar “aunque sea un huesito” de su hijo que desapareció el 14 de abril de 2024 en la Colonia Hacienda Anáhuac de la Zona Metropolitana de Monterrey. Con 33 años de edad, Abraham salió de su casa aquel día y, como a más de 125 mil mexicanos, cuyo promedio de edad alcanza apenas los 24 años, no se le volvió a ver, como si se lo hubiera tragado la tierra, aunque más bien se lo tragó la delincuencia y la indolencia e incapacidad de las autoridades.

Ler más

No hay comentarios:

Publicar un comentario