- El Fiscal General de la República se ha convertido en el personaje que lastra la promesa de justicia del presidente Andrés Manuel López Obrador
El Fiscal Gertz Manero en el informe presidencial de Andrés Manuel López Obrador, en septiembre de 2021. MARIO JASSO/CUARTOSCURO
Salvador Camarena - El País
Alejandro Gertz Manero, Fiscal General de la República, se ha convertido en el grillete que lastra la promesa de justicia del presidente Andrés Manuel López Obrador. Con poco menos de tres años y medio en el puesto, Gertz Manero ha acreditado que empeña energía y recursos públicos en causas en donde él tiene interés particular, como presunta parte afectada a nivel personal, no como representante de la ciudadanía.
Y si tener un sentido parcial de la justicia no fuera de suyo grave, el problema crece pues también en casos en que litiga a favor de sí mismo falla estruendosamente. Como ha ocurrido esta semana, cuando la Fiscalía General de la República ha sido exhibida y hasta regañada. Un juez federal ha desechado una acusación mediante la cual el titular de la FGR intentó una venganza en contra del exconsejero jurídico de la presidencia Julio Scherer Ibarra, en una guerra intestina que merma al lopezobradorismo.

No hay comentarios:
Publicar un comentario