Carlos Mota / El Financiero
La mala noticia de la semana pasada no fue que el INEGI reportara que la
economía mexicana creció 2.2 por ciento en su comparación anual durante
el tercer trimestre. La cifra es ciertamente mediocre, pero no es tan
mala como algunas personas lo ven. El problema, en mi opinión, fue que
al mismo tiempo el presidente de Perú, Ollanta Humala, estaba tronando
contra los países de la región que suben impuestos porque, según él, es
bajándolos como se puede atacar una desaceleración económica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario