Carlos Ramírez - Indicador Político
La 4T ha dejado pasar una de las reformas indispensables para la transformación del régimen priísta: el Instituto Nacional Electoral.
La transición democrática electoral en los últimos treinta años ha estado regulada por la voluntad y las decisiones de los consejeros electorales del Instituto Nacional Electoral. La democratización mexicana, por lo tanto, tiene características autoritarias, aunque ya no del Estado ni del régimen, sino de la casta divina de funcionarios del IFE-INE que han construido una democracia despótica, verticalista y paternalista.
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