miércoles, 9 de mayo de 2018

LA PARADOJA DE LA MÁQUINA Y EL DERECHO A MORIR

  • Llega al Congreso de los Diputados una proposición del Parlamento catalán que insta a despenalizar la ayuda médica para poder morir
Milagros Pérez Oliva - El País
El 12 de enero de 1998, Ramón Sampedro pudo finalmente sorber el veneno que acabaría con su vida. Llevaba décadas luchando sin éxito en los tribunales para lograr que los médicos lo ayudaran a morir. Finalmente, urdió un meticuloso plan en el que intervinieron once manos amigas. Una compró el cianuro, otra separó la dosis justa, una tercera hizo la mezcla y, así, hasta la última, que dejó el vaso con una pajita al alcance de su boca. Fue la muerte que él quería, pero no como él la quería. El 18 de octubre de 2016, Inmaculada Echevarría pudo también cumplir su deseo: el equipo médico que la atendía la sedó y le retiró el respirador.

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