De la farragosa nueva presentación de la Balanza de Pagos (formato MBP-6 del FMI) se desprende que en 2017 México registró un déficit en Cuenta Corriente de -18 mil 831 millones de dólares, desequilibrio externo (crónico) que fue, como es insana costumbre, financiado con dinero externo que ingresó vía inversión extranjera y préstamos en la (ahora) Cuenta Financiera por un pasivo neto de 26 mil 261 millones (de los cuales 4 mil 765 m provinieron de una baja de la Reserva Internacional), y por un ingreso en la (disminuida) Cuenta de Capital por un saldo de 150 millones. Por diferencia, la cuenta de ajuste Errores y Omisiones presenta un saldo negativo de -7 mil 580 millones de dólares (Gráfico 1).
Liga de Economistas en el Estado de Veracruz
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