jueves, 22 de marzo de 2018

ANDRÉS LA MORAL Y EL CARDENAL

Enrique Quintana - El Financiero
Hablar sobre las creencias religiosas de Andrés Manuel López Obrador provocó un pequeño incendio en las redes. No es raro. Lo que no es subordinación es insubordinación; lo que no es incienso para el candidato presidencial, es porque se está al servicio de los intereses políticos y económicos que quieren impedir que llegue a la Presidencia. Pero hablar de las creencias de quienes aspiran a dirigir un país, es relevante para el electorado porque puede afectar las políticas públicas y la forma como se gobierna. López Obrador, que no es un dios sino un político, lo ha hecho en el pasado, con alianzas incluso inconfesables, como quien es enemigo público de muchos de sus seguidores, el cardenal Norberto Rivera, acusado de haber encubierto a cuando menos 15 curas pederastas, entre ellos el fundador de Los Legionarios de Cristo, Marcial Maciel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario