jueves, 22 de octubre de 2015

LA REBELIÓN DISFRAZADA

  • Me resulta preocupante la creciente ruptura entre los ciudadanos y la autoridad

No todas las rebeliones son iguales. Hay algunas que no lo parecen, pero que están en marcha, silenciosas e implacables.
Esta semana una turba de 300 personas asesinó a dos hermanos que se identificaban como encuestadores en Ajalpan, estado de Puebla. Inicialmente los pobladores los acusaron de intentar plagiar a una menor y los entregaron a la policía municipal. Como los hermanos afirmaron que levantaban una encuesta sobre consumo de tortillas y mostraron gafetes de acreditación y los policías carecían de pruebas para inculparlos, la autoridad rechazó consignarlos. El rumor de que serían liberados provocó la indignación de la multitud, que en respuesta saqueó y quemó la alcaldía, vapuleó a los policías e incendió patrullas y terminó matando a golpes a los dos muchachos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario