Por: Luis Miguel González - El Economista
Aranceles, palabra del año. Es la favorita del presidente de Estados Unidos y señal inequívoca de que estamos entrando en una era de nuevo proteccionismo. En 2025, los aranceles tuvieron dos momentos “estelares”. El Liberation Day, cuando Donald Trump anunció tarifas contra todo el mundo, y la segunda quincena de diciembre, cuando el Congreso mexicano decretó aranceles para 1,400 productos provenientes de países con los que no tenemos TLC. Con esta decisión, arranca una nueva política industrial, pero también América del Norte se amuralla. Los partidarios de las tarifas defienden su eficacia para proteger industrias y empleos. Entre sus detractores, Warren Buffett es uno de los más lapidarios: las define como actos de guerra comercial, enfatiza que suben costos para consumidores y productores. Los costos los pagan los ciudadanos comunes, no los gobiernos extranjeros, dice.
Bitcoin. Reina de las criptomonedas y protagonista de un año lleno de paradojas. Alcanzó su máximo valor el 5 de octubre, cuando llegó a 125,245 dólares, gracias al apoyo de Donald Trump, que pasó de detractor a ser el mayor apoyador de las cripto y empresario de este pujante sector. En lo regulatorio, fue un año de ensueño para las criptos. En el mercado, una decepción. Ha caído 8.8% en el año, comparado con una ganancia de 121% en 2024 y 155% en 2023. Le pesa la pérdida de apetito por el riesgo de los inversionistas y un “no sé qué”: la moneda de los libertarios vive con volatilidad extrema su transición a la institucionalización. No ha sido el refugio de valor que muchos esperaban. El oro está de regreso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario