Samuel García - El Sol de México
La inversión se desplomó en los primeros seis meses del actual gobierno, por lo que contener la caída, resarcirse del golpe y llevarla a niveles históricos como pretende, será el gran reto del gobierno de Claudia Sheinbaum con su Plan México. Una tarea casi imposible.
Las cifras que ayer publicó INEGI no dejan dudas. En el primer trimestre la inversión cayó -4.0%, sumándose a la caída del -2.3% del trimestre anterior. Y si bien la inversión pública se desplomó a lo largo de 2024 y el inicio de 2025, la inversión privada también se contrajo en los últimos dos trimestres a un ritmo de -1.5% y -3.6%, respectivamente, a tasa trimestral.
Así que, en los primeros seis meses del gobierno de Claudia Sheinbaum (de octubre a marzo), los empresarios metieron el freno en sus planes de inversión o las cancelaron, mientras que el gobierno redujo drásticamente sus presupuestos para inversión física. Con esto, la inversión total cayó en 1.8 puntos porcentuales como porcentaje del PIB, de 24.8% a 23.0%, una caída solo comparable con aquella de 2.1 puntos que se registró en el primer trimestre de 2017, cuando Trump asumió su primer mandato.
El actual 23% de inversión como porcentaje del PIB nacional deja mal parado a los planes de la presidenta Sheinbaum de “mantener la proporción de inversión respecto del PIB arriba de 25% a partir de 2026”, de acuerdo con su Plan México.
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