- Después de cientos de explosiones y más de 40 horas seguidas de emisiones, los investigadores apuntan a que el volcán se estabilizará, sin una erupción dramática, pero con niveles altos de actividad
El volcán Popocatépetl arrojaba el lunes materiales incandescentes, cenizas y humo. Foto: ERIK GÓMEZ TOCHIMANI (AFP) | Vídeo: EPV
Beatriz Guillén - México - El País
Hay un gigante rugiendo bajo la tierra del centro de México. El volcán Popocatépetl está activo desde 1994 y todo el mundo lo sabía, pero desde hace unos días se han disparado las alarmas por su actividad creciente: son cientos de explosiones en más de 40 horas ininterrumpidas. Alrededor de 7.000 soldados se han movilizado a los Estados de Puebla, Morelos y México por si hace falta organizar una evacuación de las poblaciones cercanas al volcán, se han suspendido las clases en 40 municipios y se ha fijado un perímetro de seguridad de 12 kilómetros en torno al Popo. Está todo preparado, pero los científicos llaman a la calma: este episodio no es único, ha pasado antes muchas veces y a lo que apunta la historia reciente es a que el volcán se estabilizará, sin una erupción dramática, en un nivel alto de actividad y emisión de cenizas. “Es probable que en los próximos meses haya muchos episodios como el que hay ahora”, apunta el vulcanólogo Robin Campion.
No hay comentarios:
Publicar un comentario