- Pekín impulsa un modelo inclusivo que dé respuesta a los retos de la economía mundial
Cuando China ingresó en la Organización Mundial del Comercio (2001), muchos anticiparon negros presagios sobre la estabilidad de su economía y la preservación de su soberanía. En 2009, sin embargo, a contrapelo de los más aciagos pronósticos, se convirtió en la primera potencia exportadora del mundo y su crecimiento continuo la consolidó como la segunda economía del planeta. Con ese balance, China no puede estar descontenta con la globalización. No es de extrañar, por tanto, que en el Foro de Davos de este año Xi Jinping se mostrara como abanderado de dicho proceso, destacando los enormes beneficios que ha supuesto para la humanidad en conjunto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario