La crisis económica de 2008 puso a prueba la resiliencia del sistema capitalista de producción. Desde entonces, éste ha sido incapaz de recuperar su estado inicial, antes de la crisis y sus antecedentes en 2001, ya que no han cesado las perturbaciones a las que está sometido. Esta condición no equivale a su resistencia, en el sentido literal de su duración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario