Julio Scherer y Fidel Castro se conocían, se respetaban y diría incluso que simpatizaban
Homero Campa
MÉXICO, DF (Apro).- ¿Cómo está Julio Scherer? —preguntó en tono amable
Fidel Castro cuando me ubicó entre un grupo de corresponsales
extranjeros que a principios de 1997 buscaba entrevistarlo tras concluir
un acto público en La Habana.
—Don Julio está bien —contesté de botepronto, sorprendido por la pregunta.
—Pero, ven acá ¿cómo es que ya dejó la revista Proceso? —repreguntó en
alusión a que apenas en noviembre anterior don Julio, junto con Vicente
Leñero y Enrique Maza, se había retirado de las labores directivas del
semanario.
—Bueno —dije yo— renunció a la dirección, pero se mantiene como
presidente del consejo de administración de CISA, la empresa que edita
la revista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario