Por Marco A. Mares - El Economista
La controversia en materia de energía entre México, Estados Unidos y Canadá, coloca al gobierno de México, en una encrucijada.
Más temprano que tarde tendrá que resolverla. Y para ello, no tiene muchas alternativas, ni tiempo.
Entre las alternativas están: 1.- Cambiar la política energética y reconocer que no está respetando los acuerdos firmados por este gobierno, en el T-MEC; 2.- Intentar negociar uno-a-uno con las empresas que han externado inconformidades y; 3.- perder en el panel de resolución de controversias y heredar al próximo gobierno, el impacto de las sanciones arancelarias que se aplicarían a distintos sectores productivos nacionales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario