Joel Virgen - El Financiero
El desplome de la actividad económica durante el segundo trimestre fue histórico, marcando un récord anualizado cercano al 50%. Dicha contracción fue en buena medida autoinfligida, producto del encierro social y económico forzado por el brote pandémico. Desde ese punto, el encierro se ha relajado sustancialmente y la economía parece reactivarse de la mano de la normalización parcial de algunas actividades económicas y sectores. Es este contexto se enmarcarán las tasas de recuperación que veremos durante el tercer trimestre del año. De hecho, según la más reciente encuesta de expectativas levantada por Banco de México, solamente el 29% de los analistas anticipan una nueva contracción económica en el tercer trimestre frente al segundo. Opto entonces por hacer tres apuntes que considero relevantes sobre tal posible recuperación.
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