- En Minatitlán se optó por reproducir la vieja historia de la ocupación militar de una ciudad con soldados que no conocen el territorio ahora con el disfraz de una Guardia Nacional que no existe aún
Hace dos semanas, Veracruz volvió a estar en las portadas de la prensa nacional e internacional en razón de un nuevo escándalo de violencia: la masacre absurda de 13 personas, en este caso en la ciudad de Minatitlán. Al igual que en otros acontecimientos similares, no se ha detenido a los culpables. Una cosa ha quedado clara: no hay un diagnóstico de las nuevas formas que ha asumido la violencia criminal, y el Estado, en sus dimensiones local, estatal y nacional, recurre a las viejas respuestas, probadamente insuficientes, para atacar un problema cuya complejidad exige la construcción de instituciones de justicia locales, las cuales no aparecen siquiera en el horizonte discursivo de los políticos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario