John Saxe-Fernández / La Jornada
El cuadro que describen
las múltiples observaciones científicas sobre la dinámica
climático/biológica registrada en 2013 y en lo que va de 2014 es tan
amenazante, su orden de magnitud tan vasto y su compresión temporal tan
sorprendente, que resulta vital preservar nuestra capacidad de
imaginación, sorpresa o desasosiego conceptual. Como se asienta con
solidez desde estudios e investigaciones ventilados por las principales
instituciones y órganos de difusión de la ciencia contemporánea, más que
en un
cambioclimático, vivimos al borde, si no es que en medio, de una ruptura o
colapso climático antropogénico(CCA) en que están en juego la vida y la civilización. Desde Science se advierte que el aumento en la severidad de eventos tipo CCA en los próximos años es atribuible
a la inercia en torno a las emisiones de gases con efecto invernadero–(GEI) CO2, metano– (que)
crea un potencial de calentamiento global para el siglo 21 comparable en magnitud a los mayores cambios de los últimos 65 millones de años, pero en órdenes de magnitud más rápidos(www.ciencemag.org/special/climate p. 486).
No hay comentarios:
Publicar un comentario